Rescatando mientras el mundo comienza a arder
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Las esferas flotan en el aire al ritmo fascinante de uno de los actos de cabaret en la discoteca ficticia Moka Efti del programa. Este efecto puede ser adictivo, como lo describen los entusiastas de «Babylon Berlin». La serie, especialmente en su cuarta temporada, que se centra en el reencuentro de las bandas criminales de Berlín, ha sido comparada con la gran película de suspenso de 1931 del director alemán Fritz Lang, «M». Sin embargo, una mejor comparación hubiera sido con las películas de Lang, como «Dra. Mabuse, el jugador” y “Espías”, thrillers meticulosamente construidos que representan un lujo cinematográfico sin igual.
El escenario en el Berlín de la era de Weimar de los años 1920 y principios de los 1930 es un factor importante que contribuye al atractivo de la serie. La ciudad, inmersa en un entorno de fermento artístico, cultural y sexual, se encuentra al borde de una catástrofe política y social.
La narrativa se desarrolla desde los laboratorios policiales hasta los escenarios de películas expresionistas, desde las fábricas de municiones hasta las cervecerías y desde las casas señoriales hasta las vidas sórdidas. Todo ello se presenta con una meticulosa devoción por la calidad y evocación de vestimentas, decoraciones y localizaciones.
El cuarto período tuvo lugar en los primeros días de 1930, poco más de un año después del caos provocado por la crisis financiera que marcó el final del tercer período. Las imágenes noticiosas muestran filas de personas en la sartén y multitud de ejemplos destacados, sirviendo de contrapunto a las escenas de personalidades del mundo del espectáculo que se sumaron a las celebraciones a principios de 1931.
A lo largo de la temporada, Charlotte Ritter (interpretada por Liv Lisa Fries), la ex prostituta que fue pionera en la fuga de los asesinatos policiales, se aleja alegremente de las llamadas a su hijo al ritmo de una nueva y animada melodía llamada « A Day Like Gold» (en realidad interpretada por artistas contemporáneos). El cantante de jazz alemán Max Raabe).
Más adelante participará en una maratón de baile y cerrará la temporada cantando de nuevo «A Day Like Gold» proclamando: «Mañana es mañana, y ahora es ahora, y ahora quiero bailar». Aunque la metáfora es obvia, nuestra conciencia de quién está en el mundo donde se consume el fuego atenua su sencillez.
La nueva temporada está llena de historias. En el lado del drama criminal, el asesinato de un funcionario público desencadena una investigación sobre las bandas criminales de la ciudad, lo que resulta en violencia en los clubes de boxeo.
Como parte de la historia social, Gereon Rath (interpretado por Volker Bruch), el detective de policía y experto en heroína que es el interés amoroso intermitente de Ritter, ha sido envuelto por las SA, las milicias paramilitares de camisa marrón del partido nazi.
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